Nazis y judíos en los Andes: Los Infames

Hay un episodio histórico sobre el que se ha escrito muy poco: el reencuentro entre judíos y nazis en Bolivia.

Verónica Ormaechea ha novelado este episodio en Los infames, la historia de Boris, un judío que decide huir de Polonia poco antes de la invasión nazi, eligiendo como destino uno de los dos lugares que aún conceden visados: Bolivia. La novela avanza con varias tramas paralelas, que se desarrollan principalmente en Varsovia y La Paz, protagonizadas por Boris, su familia y el magnate minero Moritz Hochschild, el "Schindler boliviano", un judío visionario que no escatimó esfuerzos para sacar a sus correligionarios de Europa en los años del terror.

El trabajo de documentación realizado por Ormaechea es descomunal, desde el infierno de Auschwitz hasta La Paz de mediados del siglo XX, destacando el punto de vista de un Boris que mantiene un pie en cada mundo y de un Hochschild abrumado por la tragedia europea y hostigado por el Gobierno boliviano, que pretende apropiarse de su inmensa riqueza. El final de la novela es, de lejos, lo mejor de un libro que no realiza concesiones ni suaviza los golpes.

Con todo, lo más interesante para el lector será probablemente la revelación de una verdad poco conocida fuera de las fronteras de Bolivia. Poco después de la II Guerra Mundial, con las cenizas del Holocausto aún flotando en el aire, los judíos que habían huido del horror volvieron a encontrarse con sus verdugos nazis en Bolivia, compartiendo las mismas calles y los mismos pueblos. Bolivia fue uno de los destinos de la "ruta de las ratas", que permitió a los nazis escapar de la justicia, huyendo clandestinamente de Europa para empezar nuevas vidas al otro lado del Atlántico.

Con la excepción de Klaus Barbie, el carnicero de Lyon, estos nazis vivieron en paz hasta el fin de sus días, ajenos al pasado monstruoso de Europa. Ormaechea relata cómo los nazis crearon su propia colonia, con clubs y colegios, y vivieron una existencia acomodada que llevó a sus descendientes a ocupar cargos relevantes en la administración boliviana y las principales empresas del país. 

A día de hoy, el tema nazi en Bolivia sigue siendo casi tabú. Con Los infames, Verónica Ormaechea ha contribuido a rescatar el recuerdo de ese episodio de la peor guerra de la Historia, que siguió dejando silenciosas cicatrices durante décadas en el corazón de América Latina.